Guiar y dar voz a las infancias

La inspiración de Nayla Teresita Pascual Méndez de convertirse en maestra viene de cuando era muy pequeña. Desde que tiene memoria siempre ha disfrutado jugar, contar historias, acompañar y estar presente en la vida de niños y niñas. Además, cuando era estudiante tuvo la fortuna de tener a Miss Lolita como ejemplo y vio la importancia del cuidado, cariño y aliento que una persona docente puede lograr con sus estudiantes, especialmente si estos son de corta edad.

Nayla es maestra de preescolar en el Colegio Champal en Villahermosa, Tabasco y tiene más de 16 años trabajando como docente. Imparte las materias del área de Español y reconoce que compartir su día a día con niños y niñas de entre 5 y 6 años es como tener un aprendizaje constante pues al final del día es un crecimiento mutuo con grandes enseñanzas de la niñez a la vida adulta.

En edades tempranas no se conocen barreras, es fácil expresar inocencia y sinceridad con libertad y no existe el miedo de decir lo que se piensa. Encuentran en el juego, las risas y bromas una forma de expresarse y son un constante recordatorio de que los prejuicios, estereotipos y limitaciones son una construcción de la sociedad que roba la espontaneidad y la autenticidad con la que nacemos.

Nayla encuentra fascinante esta edad porque sus estudiantes son quienes van conociendo la realidad a través de su propia experiencia. Por ejemplo, en la materia de “Filosofía para niños” que ella imparte, su comunidad educativa es quien va  construyendo sus propios conceptos de las cosas a través del diálogo y la escucha activa. A ella como maestra solo le toca ser guía y mediadora para que así sus estudiantes puedan compartir, argumentar y llegar a conclusiones por cuenta propia. 

También reconoce que contar con una red de apoyo que le ha permitido ser una Agente de Cambio para su comunidad ha sido algo muy importante para ella, pues la comunidad de docentes y directivos del Colegio Champal, sus padres, esposo y tres hijos han sido piezas clave en su camino. 

Para Nayla una de las principales recomendaciones que hace a cualquier persona interesada en educar en agencia de cambio es brindar a sus estudiantes la libertad para expresar sus pensamientos e ideas, trabajar en la inclusión y empatía, ser una guía en su camino de descubrimiento de conocimientos y habilidades, y no olvidar ser un espacio seguro para ellos y ellas.

Ante los desafíos y retos que el mundo ha vivido a raíz de la pandemia, cree que en su proceso como docente ha sido fundamental poner en práctica la resiliencia pues estos últimos años han sido un claro reflejo de que se puede lograr mucho más de lo que a veces creemos. Como ejemplo, comparte que ella ha logrado adquirir un conocimiento más profundo sobre el uso de la tecnología y estrategias virtuales en la educación que le permiten estar mejor preparada para los retos en clase.

Agradecemos y celebramos a Nayla por recordarnos que es posible vivir en un mundo donde todas las personas podemos ser Agentes de cambio. Por trabajar con niños y niñas, y recordarles que pueden lograr lo que se propongan, que sus capacidades son únicas y de gran valor para el mundo, que las diferencias nos complementan y que, como seres humanos, necesitamos trabajar en red para ser mejores.

Estar en constante cambio es un desafío y hay que estar dispuesto/a para innovar, cambiar y aprender.

Si te interesa conocer y aplicar una guía de buenas prácticas educativas con fichas de actividades para que niños, niñas, adolescentes y jóvenes confíen en su capacidad de liderazgo e impacten de manera positiva en te invitamos a descargarlas aquí

Y si tu también tienes una historia inspiradora en la que uses una buena práctica educativa con tus estudiantes, cuéntanos aquí como lo has hecho